El bajo de esta canción lo es TODO para mi, me golpeó fuerte en su primera escucha. El diseño sonoro es inmaculado, me parece precioso y preciso, como gran parte de la obra de este productor. Evian es un artista que siempre me ha fascinado, desde su relación con David Rudnick en lo gráfico hasta el gusto que tenía un ex jefe por él. Me ha rondado hace rato. Esta canción me la mostró Espuma hace un tiempo y me voló la cabeza. De inmediato dije: quiero hacer algo como eso. Nunca lo hice, jajajaja, pero fue un gran motivante para otras cosas. Christ tiene una paleta sonora súper amplia e inspiradora, valoro mucho eso en un artista: que respire inquietud y búsqueda. Gran referente, indudablemente, en lo que yo hago. 

Este disco entero me lleva a momentos muy tensos de mi vida y así como a otros muy alegres. Detrás de ese corporativo sonido playero, se esconden sutilezas que me parecen bellísimas. Valle es una persona sumamente meticulosa. Tiene una entrevista con Tone Glow que es muy esclarecedora sobre su figura y su proceso. Es un artista que parece estar muy lejos de mi, pero que por eso mismo puedo admirar tanto. Me llega a fascinar, de alguna manera siempre vuelvo a él. Recomiendo repasar su variada discografía, hay algo para cada momento y persona. Es un gran repositorio de recuerdos.

Cuando descubrí este disco en medio de la pandemia no lo podía creer: las texturas y melodías trabajadas de una forma que parecían provenir de una escuela de electrónica ambiental con la que había crecido, pero que venían incluso aún más cerca de casa. La obra de Illapu y de grupos de la misma camada siempre la tuve algo cerca, desde chica, pero la exploré en profundidad ya siendo mayor. Esta canción sintetiza la linda vibra efímera que caracteriza a este disco, es un fragmento de algo que pillamos en medio de su suceso y que tan rápido como encontramos se esfuma. Es un respiro tranquilo y tenso a la vez. Obvio que una banda de este calibre tiene joyas como esta en su repertorio. No me sentí forzada a incluir algo chileno, la idea estaba claramente al alcance de la mano. Siempre que puedo comparto esta canción.

Azúcar fina a la vena. Hay canciones que te golpean un puñetazo en la cara por lo divertidas que son. Me encanta bailarla y la he tocado en vivo un par de veces. La producción obviamente es mega cuidada a la vez que muy “en tu cara”. Es clara, pero poderosa. Esta fue hecha por el dúo de la australiana Hayley Aitken y el sueco Ollipop, quienes han hecho todas mis canciones favoritas de esta subunidad de Loona. No soy tan conocedora del k-pop, pero tengo mis preferencias. OEC  y Aespa me encantan, y me gustan canciones de grupos como Red Velvet. Son grupos que por lo general me ofrecen cuestiones que no consumo normalmente y eso me ayuda bastante.  Me sofoca quedarme pegada en una sola cosa.

La voz de Daniela Lalita me enamora de una manera profunda. El control que tiene sobre ella es tremendo y su proyección es envolvente. Desde el primer soplido se nota su trabajo. La voz humana tiene algo terrorífico y atrapante para mi, tengo una relación particular con ella. Es un punto de referencia y empatía obvio, claro, pero bajo el control correcto tiene una facilidad grande para desparramarse la cual es sumamente cautivadora. Sumado a la producción de Amnesia Scanner, disonante, chirriante, destartalada, ambos mundos se mezclan y potencian el uno al otro increíblemente. Son un combo tremendo. Muy entretenido. El procesamiento de la voz me influenció incluso para mi trabajo con otros elementos.